Cuatro deportistas vallisoletanos dispuestos a recorrer los 144 kilómetros del Canal de Castilla desde su nacimiento en Alar del Rey hasta Valladolid empleando diferentes medios (natación, carrera a pie, btt y piragüa) en un única jornada.
Será el próximo viernes 10 de agosto cuando, Javier Ortega, Mauricio Martín y Óscar Garrote, del C.D. Triatlón Pisuerga, junto con Alberto Celestino del Club Piragüismo Racing Valladolid, afrontarán este reto deportivo ideado por ellos mismos y que les someterá a un intenso esfuerzo durante más de 9 horas, sin más afán que el de probar su capacidad física y moral, y donde será importante trabajar en equipo.
Aunque practican de forma habitual las cuatro disciplinas deportivas, como demuestra el hecho de haber participado en varias competiciones de cuadriatlón, incluido el Campeonato del Mundo de Cuadriatlón 2011 en la Republica Checa, en este caso la distancia total a recorrer va a suponer un reto extra, si bien en parte del recorrido van a contar con familiares y amigos que les acompañarán durante algunos kilómetros o les irán aportando todo lo necesario para ir sumando metros a esta singular andadura que les llevará a descubrir históricos rincones de esta obra de ingeniería del siglo XIX que perdura en el tiempo para uso y disfrute de todo el que se quiera acercar a sus aguas y caminos.
El reloj se pondrá en marcha en la dársena del Canal en Alar del Rey, donde embutidos en sus trajes de neopreno realizarán una travesía a nado hasta la primera esclusa situada a 2,5 km en Barrio de San Vicente. Les acompañará en este segmento el triatleta Víctor Manuel González, clasificado para el Ironman de Hawai, y la destacada nadadora de sincro, Patricia Celestino, del C.N.S. Fabio Nelli.
Tras la natación seguirá una etapa de 21,5 km de carrera a pie por los caminos de sirga hasta la esclusa 13 en Naveros de Pisuerga. Será uno de los segmentos más duros y donde el calor podrá jugar en su contra, para contrarrestar sus efectos no deberán descuidar la alimentación e hidratación. En este tramo, el Canal une sus aguas con el río Pisuerga, lo que obliga a desviarse para salvar el río por el puente de la vía del tren para retomar el camino unos metros más allá. Víctor Manuel seguirá junto con los cuatro protagonistas en esta etapa.
El tercer segmento, el más largo, lo completarán en BTT sobre una distancia de 95 km que les llevará a transitar por el Canal pasando junto a Osorno, Frómista y la ciudad de Palencia para finalizar en Cubillas de Santa Marta (esclusa 39). Durante esta parte del recorrido, será importante aprovechar para comer e hidratarse, al tiempo que van sorteando esclusas, centros destinados al turismo y actividades deportivas, acueductos como el de Abánades o el de Vallarna, puentes como el de Carrecalzada o el de Cabañas, las almenaras, e infinidad de edificios, la mayoría en estado ruinoso pero que fueron vitales para la actividad del Canal. Se espera que nuestros protagonistas también estén acompañados por compañeros de equipo y amigos en este segmento.
Llegados a Cubillas de Santa Marta, deberán cambiar de modo de transporte, siendo momento de dejar descansar las doloridas piernas para que sean las extremidades superiores las que marquen el ritmo de la marcha, palada tras palada, que contadas superarán las doce mil, encima de sus kayaks de competición, con una distancia a recorrer de 25 km hasta el final del trayecto en la dársena del Canal de Castilla en Valladolid. Tramo que se espera sea duro por el cansancio acumulado y por las largas rectas exentas de vegetación con las que poder protegerse del sol y que dominan el recorrido del Canal en este tramo. Para llegar a la meta van a necesitar salvar hasta tres esclusas (nº 40 en Corcos, nº 41 y 42 en las proximidades de Valladolid), lo que les obligará detener sus kayaks en la orilla y portearlos a hombros hasta encontrar un lugar donde retomar el paleo.
En resumen, toda una aventura de 2,5 km nadando, 21,5 km corriendo, 95 km en btt y 25 km en kayak, por el Canal de Castilla, una de las herencias históricas más importantes de nuestra región, que estos cuatro deportistas y amigos están dispuestos a disfrutar, sin demasiada prisa, pero sin pausa.
Quien sabe, si lo que hoy es un desafío personal de cuatro amigos, a la vuelta de unos años puede verse convertido en algo más multitudinario. El Canal de Castilla ofrece un entorno inigualable con un potencial por explotar.
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